La Universidad del desierto

Miguel Gallego
Miguel Gallego Roca


MIGUEL GALLEGO, 
algo más que crítica literaria

La Universidad del desierto

Miguel Gallego
Miguel Gallego Roca


MIGUEL GALLEGO, 
algo más que crítica literaria

La Universidad del desierto

Miguel Gallego
Miguel Gallego Roca


MIGUEL GALLEGO, 
algo más que crítica literaria

La Universidad del desierto. Miguel Gallego


MIGUEL GALLEGO, 
algo más que crítica literaria

La Universidad del desierto. Miguel Gallego


MIGUEL GALLEGO, 
algo más que crítica literaria

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

"El canibal y otros cuentos". Juan Uceda Carreño

      Como quiera que en enero del año 2000 se publicó, por obra y previo pago de su autor, y como suele ocurrir demasiadas veces en Almería, porque nadie te publica, y más en los tiempos de crisis en que estamos,  si no eres FULANICO DE TAL o MENGANICO DE CUAL, me atrevo, en este día del libro, a transcribir uno de sus minicuentos con la esperanza de que alguien lo lea y valore, sin alardes, ni falsas modestias, ni golpes de pecho, que este hombre prometía como buen Escritor.

Su autor: JUAN UCEDA CARREÑO
La fotografía de la portada es de Francisco Ortiz
Imprimió: Imprenta Úbeda, SL.- Almería
Depósito Legal: AL- 11-2000.- ISBN.: 978-84-607-0034-8.- 
Almería, Enero 2000

Vicio insuperable.

         Aquel día Juana y yo habíamos discutido una vez más a causa de mi vicio. Por la noche, mientras ella dormía, la inquietud me mantuvo despierto. Sin dejar de comerme las uñas de una mano, con la otra encendí la lamparita. Miré a mi lado. Las bonitas formas de Juana se transparentaban a través del camisón. El bordado del escote me recordó el encaje de papel de las tartas.
          Lamentaba no haberme reconciliado. Los enfrentamientos habían ido aumentando en la medida en que había crecido mi obsesión. Me sabía culpable, pero también incapaz de superarlo.
     
           Ansioso, palpitante, con la mirada fija en ella, el escozor me hizo retirar de la boca los dedos, que sustituí de inmediato por los de la otra mano. Me acerqué a Juana sigilosamente. La necesitaba, pero era impensable su colaboración. Aún no comprendo cómo, en el estado de agitación en que me encontraba conseguí hacérselo sin sacarla de su sueño.
     
            Despertó, eso sí, por la mañana. No quiero acordarme de su reacción al verse las uñas de las manos y de los pies.

Una rosa por un libro.

Antonio Guerrero: "Jugando a la cometa"


"La niña jugaba con la cometa, allí junto al bosque, en aquella pequeña colina, un hilo de cáñamo unía la mano a ese cruce de pequeñas maderas y tela que era la cometa, o pandorga, así la llamaban en otros lugares de Andalucía, larga cola verde, de serpiente o más bien culebra que juega con el aire. Las lavanderas pasaban por el camino al pie de la colina y se internaban entre los álamos, con sus canastas de mimbre en los costados, en los cuadriles como ellas solían decir. Las ropas golpearían las piedras entre las que discurría el Nacimiento, aguas frías que enrojecen las manos, aguas que irían quitando manchas de tierra, sudores del trabajo diario con la azada y con el arado. La cometa, dirigían sus alcahuetes ojos hacía el bosque. Maribel había pintado dos ojos y una boca sobre la tela blanca con unos tizones.

Por entre los troncos de los árboles se colaba el canto de Pilar, que restriega que restriega, cantaba, "Cuando anochece en el mar soñando que eres la roca y yo no veo tu boca para poderla besar que miedo sienten las olas más miedo paso yo sola cuando a mi lado no estás.

Y esa luna marinera

lo solita que ya está

vigilando a las estrellas

a la barca y a la vela

y a los hombres en el mar"

Canta Pilar y las demás disminuyen su trajín, hasta la cometa se vuelve algo sosegada, hasta el aire, vamos a escuchá que diría alguien, solo el agua actúa acompañando a la voz....."

El cante de Pilar le llegaba acompañado del rumor del arroyo. Aquel arroyo al que pomposamente le llamaba todo el mundo "el río". Cantaba poniéndole toda la voz, como sólo se canta en el campo y en los espacios abiertos, copiando el estilo que tantas veces había oído en las cuadrillas de segadores.

La algarabía y las bromas de las comadres que chapoteaban enjuagando la ropa, se fueron reduciendo hasta llegar a un respetuoso silencio que permitiera escuchar la canción. A Carmela, cuando le llegó la estrofa "y yo no veo tu boca... para poderla besar" le entró un escalofrío que le bajó por la espalda, mientras un rubor pintaba sus mejillas de rojo. Tenía aún palpitando en sus labios los besos que había depositado él tiernamente la noche anterior, y le parecía que podían notarlo como si lo llevara escrito en la frente.

Carmela, con sus diecisiete años recién estrenados, tenía que ocultar que bebía los vientos aquel muchacho de cara triste y profundos ojos negros que apodaban "el cubano" porque había regresado hacía unos años de luchar en la Guerra de Cuba. Aquel último encuentro a través de la reja en la noche anterior, había despertado en ella un volcán que había hecho que su corazón se le subiera casi a la boca. Cuando ya estaba loca de besos había notado como las manos de "el cubano" habían ido subiendo el refajo hasta tocar sus muslos desnudos...

Revista n1, año I Agosto 2000 (pág.9-10)

Antonio Guerrero: "Jugando a la cometa"


"La niña jugaba con la cometa, allí junto al bosque, en aquella pequeña colina, un hilo de cáñamo unía la mano a ese cruce de pequeñas maderas y tela que era la cometa, o pandorga, así la llamaban en otros lugares de Andalucía, larga cola verde, de serpiente o más bien culebra que juega con el aire. Las lavanderas pasaban por el camino al pie de la colina y se internaban entre los álamos, con sus canastas de mimbre en los costados, en los cuadriles como ellas solían decir. Las ropas golpearían las piedras entre las que discurría el Nacimiento, aguas frías que enrojecen las manos, aguas que irían quitando manchas de tierra, sudores del trabajo diario con la azada y con el arado. La cometa, dirigían sus alcahuetes ojos hacía el bosque. Maribel había pintado dos ojos y una boca sobre la tela blanca con unos tizones.

Por entre los troncos de los árboles se colaba el canto de Pilar, que restriega que restriega, cantaba, "Cuando anochece en el mar soñando que eres la roca y yo no veo tu boca para poderla besar que miedo sienten las olas más miedo paso yo sola cuando a mi lado no estás.

Y esa luna marinera

lo solita que ya está

vigilando a las estrellas

a la barca y a la vela

y a los hombres en el mar"

Canta Pilar y las demás disminuyen su trajín, hasta la cometa se vuelve algo sosegada, hasta el aire, vamos a escuchá que diría alguien, solo el agua actúa acompañando a la voz....."

El cante de Pilar le llegaba acompañado del rumor del arroyo. Aquel arroyo al que pomposamente le llamaba todo el mundo "el río". Cantaba poniéndole toda la voz, como sólo se canta en el campo y en los espacios abiertos, copiando el estilo que tantas veces había oído en las cuadrillas de segadores.

La algarabía y las bromas de las comadres que chapoteaban enjuagando la ropa, se fueron reduciendo hasta llegar a un respetuoso silencio que permitiera escuchar la canción. A Carmela, cuando le llegó la estrofa "y yo no veo tu boca... para poderla besar" le entró un escalofrío que le bajó por la espalda, mientras un rubor pintaba sus mejillas de rojo. Tenía aún palpitando en sus labios los besos que había depositado él tiernamente la noche anterior, y le parecía que podían notarlo como si lo llevara escrito en la frente.

Carmela, con sus diecisiete años recién estrenados, tenía que ocultar que bebía los vientos aquel muchacho de cara triste y profundos ojos negros que apodaban "el cubano" porque había regresado hacía unos años de luchar en la Guerra de Cuba. Aquel último encuentro a través de la reja en la noche anterior, había despertado en ella un volcán que había hecho que su corazón se le subiera casi a la boca. Cuando ya estaba loca de besos había notado como las manos de "el cubano" habían ido subiendo el refajo hasta tocar sus muslos desnudos...

Revista n1, año I Agosto 2000 (pág.9-10)

Antonio Guerrero: "Jugando a la cometa"


"La niña jugaba con la cometa, allí junto al bosque, en aquella pequeña colina, un hilo de cáñamo unía la mano a ese cruce de pequeñas maderas y tela que era la cometa, o pandorga, así la llamaban en otros lugares de Andalucía, larga cola verde, de serpiente o más bien culebra que juega con el aire. Las lavanderas pasaban por el camino al pie de la colina y se internaban entre los álamos, con sus canastas de mimbre en los costados, en los cuadriles como ellas solían decir. Las ropas golpearían las piedras entre las que discurría el Nacimiento, aguas frías que enrojecen las manos, aguas que irían quitando manchas de tierra, sudores del trabajo diario con la azada y con el arado. La cometa, dirigían sus alcahuetes ojos hacía el bosque. Maribel había pintado dos ojos y una boca sobre la tela blanca con unos tizones.

Por entre los troncos de los árboles se colaba el canto de Pilar, que restriega que restriega, cantaba, "Cuando anochece en el mar soñando que eres la roca y yo no veo tu boca para poderla besar que miedo sienten las olas más miedo paso yo sola cuando a mi lado no estás.

Y esa luna marinera

lo solita que ya está

vigilando a las estrellas

a la barca y a la vela

y a los hombres en el mar"

Canta Pilar y las demás disminuyen su trajín, hasta la cometa se vuelve algo sosegada, hasta el aire, vamos a escuchá que diría alguien, solo el agua actúa acompañando a la voz....."

El cante de Pilar le llegaba acompañado del rumor del arroyo. Aquel arroyo al que pomposamente le llamaba todo el mundo "el río". Cantaba poniéndole toda la voz, como sólo se canta en el campo y en los espacios abiertos, copiando el estilo que tantas veces había oído en las cuadrillas de segadores.

La algarabía y las bromas de las comadres que chapoteaban enjuagando la ropa, se fueron reduciendo hasta llegar a un respetuoso silencio que permitiera escuchar la canción. A Carmela, cuando le llegó la estrofa "y yo no veo tu boca... para poderla besar" le entró un escalofrío que le bajó por la espalda, mientras un rubor pintaba sus mejillas de rojo. Tenía aún palpitando en sus labios los besos que había depositado él tiernamente la noche anterior, y le parecía que podían notarlo como si lo llevara escrito en la frente.

Carmela, con sus diecisiete años recién estrenados, tenía que ocultar que bebía los vientos aquel muchacho de cara triste y profundos ojos negros que apodaban "el cubano" porque había regresado hacía unos años de luchar en la Guerra de Cuba. Aquel último encuentro a través de la reja en la noche anterior, había despertado en ella un volcán que había hecho que su corazón se le subiera casi a la boca. Cuando ya estaba loca de besos había notado como las manos de "el cubano" habían ido subiendo el refajo hasta tocar sus muslos desnudos...

Revista n1, año I Agosto 2000 (pág.9-10)

Antonio Guerrero: Jugando a la cometa




Jugando a la cometa
"La niña jugaba con la cometa, allí junto al bosque, en aquella pequeña colina, un hilo de cáñamo unía la mano a ese cruce de pequeñas maderas y tela que era la cometa, o pandorga, así la llamaban en otros lugares de Andalucía, larga cola verde, de serpiente o más bien culebra que juega con el aire. Las lavanderas pasaban por el camino al pie de la colina y se internaban entre los álamos, con sus canastas de mimbre en los costados, en los cuadriles como ellas solían decir. Las ropas golpearían las piedras entre las que discurría el Nacimiento, aguas frías que enrojecen las manos, aguas que irían quitando manchas de tierra, sudores del trabajo diario con la azada y con el arado. La cometa, dirigían sus alcahuetes ojos hacía el bosque. Maribel había pintado dos ojos y una boca sobre la tela blanca con unos tizones.

Por entre los troncos de los árboles se colaba el canto de Pilar, que restriega que restriega, cantaba, "Cuando anochece en el mar soñando que eres la roca y yo no veo tu boca para poderla besar que miedo sienten las olas más miedo paso yo sola cuando a mi lado no estás.

Y esa luna marinera

lo solita que ya está

vigilando a las estrellas

a la barca y a la vela

y a los hombres en el mar"

Canta Pilar y las demás disminuyen su trajín, hasta la cometa se vuelve algo sosegada, hasta el aire, vamos a escuchá que diría alguien, solo el agua actúa acompañando a la voz....."

El cante de Pilar le llegaba acompañado del rumor del arroyo. Aquel arroyo al que pomposamente le llamaba todo el mundo "el río". Cantaba poniéndole toda la voz, como sólo se canta en el campo y en los espacios abiertos, copiando el estilo que tantas veces había oído en las cuadrillas de segadores.

La algarabía y las bromas de las comadres que chapoteaban enjuagando la ropa, se fueron reduciendo hasta llegar a un respetuoso silencio que permitiera escuchar la canción. A Carmela, cuando le llegó la estrofa "y yo no veo tu boca... para poderla besar" le entró un escalofrío que le bajó por la espalda, mientras un rubor pintaba sus mejillas de rojo. Tenía aún palpitando en sus labios los besos que había depositado él tiernamente la noche anterior, y le parecía que podían notarlo como si lo llevara escrito en la frente.

Carmela, con sus diecisiete años recién estrenados, tenía que ocultar que bebía los vientos aquel muchacho de cara triste y profundos ojos negros que apodaban "el cubano" porque había regresado hacía unos años de luchar en la Guerra de Cuba. Aquel último encuentro a través de la reja en la noche anterior, había despertado en ella un volcán que había hecho que su corazón se le subiera casi a la boca. Cuando ya estaba loca de besos había notado como las manos de "el cubano" habían ido subiendo el refajo hasta tocar sus muslos desnudos...

Revista n1, año I Agosto 2000 (pág.9-10)
Antonio Guerrero

a.- Revista n.1, año I Agosto 2000 (pág. 1-3)

El poema no es poema si no es leído
Gloria Fuertes
 
LOS COMIENZOS. A MODO DE PRÓLOGO SIN MIEDO A LAS CRÍTICAS. 
 
Un día, un grupo de amigos, en una noche de tertulia en el canal de http://www.aered.org, llamado #lataberna_andaluza, decidimos unificar esfuerzos y crear una página web que recogiera nuestras vivencias,  sentimientos,  alegrías, recuerdos; Expresados  en forma de dialogo o de relato, cuento o poema, ensayo o crítica,  para disfrute de todos cuantos lo quisieran leer, a la vez que  invitábamos a todos a participar de ese encuentro continuando los relatos o participando con otros nuevos de creación propia. 


La primera idea era que estuvieran presentes “todos los Andaluces del Mundo Mundial”, que diría Manolito Gafotas, y así unificar sentimientos  y conocimientos.

 
Pero la red es inmensa, todo lo hace posible, sin lugar a dudas , Internet se ha convertido en muy poco tiempo en el medio más rápido, económico y eficaz para publicar y darse a conocer,  de ahí que tuviéramos que extender los brazos a otras colaboraciones que nos llegaban desde distintos puntos de España y del Extranjero, como, por ejemplo, las ciudades de Madrid, Bilbao. Perú, Argentina, Colombia, Chile......

 
En sucesivos números todos nuestros amigos verán publicadas sus obras para deleite de todos nosotros. 



Así fue como nació LA VOZ DE LA COMETA,  tu voz en Internet.
¿Por qué este nombre y no otro cualquiera? . Bueno,  en esto tengo toda la culpa. Cuando era chica me gustaba jugar con una cometa de caña y trapo de colorines atada a una cuerda que mi padre me había hecho. Era feliz y todo lo que rodeaba a mi infancia lo recuerdo lleno de humanidad, belleza y felicidad. Qué mejor que empezar contando aquellas vivencias que se recuerdan como más felices, que te llenan más, o te han trazado la vida para siempre, LA INFANCIA. 



Nuestro amigo, y entusiasta, Fernando Rebollo se puso manos a la obra lanzando un correo electrónico a todos los integrantes de la lista de Andalucía Comunidad Virtual para que participaran mandándonos todas sus creaciones. 

Poco a poco se fue llenando nuestro buzón con las colaboraciones de PILAR VINYET, que debido a la extensión de su magnífica obra, ocupará preferentemente el segundo volumen de esta edición. Un adelanto de sus bellos poemas, es éste que a continuación ponemos. 
 
PILAR VINYET,  Viajes por Andalucía”.  TARDE LARGA

Descansa en la tarde larga
ya se cumplió tu andadura
el crujir de tu espinazo
el jadear de tu pecho
el adiós de tus ansias.

Poeta deseado tu vivirás
tus poesías me abrazan
alimentan mi pensamiento
 moviendo mis labios
en cada tarde larga.

Hace ya un largo invierno
se perdió mi tímida pisada
en el Puerto dejé en la arena
laberinto, cañas, versos y
entre marismas mi huella marcada.

Sólo el viento ahora suena
riego los geranios del silencio
amarro barcas estropeadas
perfumo lejanías soñadas
en la certeza que te tengo.

...en esta tarde larga...
...en esta larga tarde...

Como ella, compañeros de la talla de LOLA SORIA,  MANOLO MANZANO,  JULIA CORRALES,  ALBERTO ORTUÑO,  ANGEL SIMON,  RICARDO VILLEGAS,  MERCEDES VIEIRA,  ANTONIO GUERRERO, JUAN JOSÉ RUIZ PLAZA,  CLAUDIO SILLERO,  PEDRO  BRAVO, FRANCISCO CAÑABATE RECHE,   y por supuesto,  la más intensa y profunda colaboración con FERNANDO REBOLLO, que en este primer volumen tiene situación de preferencia por saber como nadie acercarse a nuestras raigambres,  sentires, de las Alpujarras que parece que hubiese estado viviendo toda su vida en Almería.  Sorprende, enamoran sus escritos, y desde aquí le animamos a seguir en esta andadura que le es tan propia. 

La Naturaleza se funde en un abrazo único rompiéndose las barreras entre Huelva y Almería,  Cádiz o Málaga... Toda Andalucía,  todo el Mundo, seguirán una tendencia con unos rasgos comunes, una obra emprendedora y única que esperamos nunca cese.

 
¿Por qué decidimos llevarla a la imprenta?.  Hay infinidad de respuestas, pero sólo unas pocas nos convencen más... Es la imposibilidad, que tienen algunos sectores de la población, de una vida estable, fuerte económicamente hablando, así como la imposibilidad por ahora de tener conexión a Internet. 



Otro motivo, y ya no cuento ninguno más, es simplemente “egoísmo”. Sí. Esa necesidad de tocar el papel, sentir el olor a recién impreso,  acariciar sus lomos, o tocar sus hojas,..  Para todos aquellos “viciosos” de la lectura empedernida, acostumbrados nuestros ojos a leer tanto tiempo sobre papel couché que no  nos basta verlo en la red,.. Queremos más. 
Un abrazo desde este lado de la mar, hoy revuelta por éstos, siempre eternos, vientos del Sahara.

En el arrecife de las Sirenas, unas voces cantan. Maribel Cerezuela


En las puertas del Arrecife de las Sirenas, se oye una voz que canta cada día las alegrías del amanecer, y con esas voces melodiosas,  quiero llegar a todos vosotros con mucha ilusión.
(dedicado a todo el canal de ajedrez.- Alma y el ajedrez. amigos para siempre)

miércoles, 16 de agosto de 1998




AUREA nick CANEDA


El mar espejo de la inmensidad
puzzle de los cinco continentes
El mar tragador de vida
furia de vientos. .sueño de poetas.
El mar sin heredados y desesperados temores.
El mar tumba de poesías, tumba de deseos nunca cumplidos
El mar escondiendo su avaricia medida por nudos.
El mar furia de vientos que timonea con las velas.....
mientras su casa oscura carece de herederos.
Puzzle de los cinco continentes.
como la vida misma
El mar hondura sin pies ni cabeza




BOKE

Déjame acariciarte  lentamente,
déjame lentamente comprobarte,
ver que eres de verdad, un continuarte
de ti misma a ti misma extensamente.
Onda tras onda irradian tu frente
y, mansamente apenas sin rizarte,
rompen sus diez espumas al besarte
de tus pies en la playa adolecente.
Así te quiero, fluida y sucesiva,
manantial tú de ti, agua furtiva,
música para el tacto perezosa.
Así te quiero, en límites pequeños,
aquí y allá, fragmentos, lirio, rosa,
y tu unidad después, luz de mis sueños.







.-D.OLIVO Eduardo .-(nick:Camski)

Quiero hacer el bien en mi vida
para sentir en mi pecho
una dulzura escondida
que engendra la indefinida
satisfacción del bien hecho.
Que es verdad, que aunque haya quien
nunca logrará entenderlo,
hay un goce en hacer bien
por solo el goce de hacerlo.






Eduardo (nick:Camski)


Mercurio presto en sus formas,
pintó el tablero de suertes claras y oscuras,
y fundió el tiempo partido en noches y días.
El campo repartido y la tropa preparada.
Instrumento de guerra que calma el ansia dura.
Entonces empezó la batalla
que me hizo desconfiar.
Cuando la dama sintió
el Dios amor no la escuchó,
sino que fue a mover
un peón demasiado avanzado.
Detrás de su mano derecha estaba
el que llevaba la rosa en su escudo.
Ella movió el peón
y su fiereza apareció
para hacer el resto.
Con el peón arrogante
vino directa a mi rey
que detrás de mi alfil estaba.
Convenimos que retrocediese
y después el alma de la dama
me hizo jaque mate.





 JAUME (nick: Frenadol)

TICO

El alma tenías
tan clara y abierta,
que yo nunca pude
entrarme en tu alma.
Busqué los atajos
angostos, los pasos
altos y difíciles...
A tu alma se iba
por caminos anchos.
Preparé alta escala
-soñaba altos muros
guardándote el alma-
pero el alma tuya
esta sin guarda
de tapial ni cerca.
Te busqué la puerta
estrecha del alma,
pero no tenía,
de franca que era,
entradas tu alma.
¿En dónde empezaba?
Acababa, ¿en donde?
Me quedé por siempre
sentado en las vagas
lindes de tu alma.




EL GOLEM.- EMILIO (nick: El Golem)
Quizás no sea ternura la palabra precisa
para este cierto modo compartido
de quedar en silencio ante lo bello exacto,
o de hablar yo muy poco y ser tú la belleza
misma, su emblema, aunque tan próxima y latiendo.
Y es también un destino unánime que vuelvan
a idéntico silencio -cuando llegue la hora
de la tregua indecible- mi palabra y tu zarpa.




PEDRO CHINCOA (nick:TUK)


Caminé hacia el infinito, despacio, despacio
para no despertar ruidos, ni sueños, ni penas
Solo piezas en el tablero, caminando despacio
despacio, despacio, sin un ruido, sin un delirio
sin un te quiero.

         

.-DANIEL(nick: Dan)

Te lo di todo mi niña
en una noche de invierno,
Sevilla estaba dorada
como morenos tus pechos.
Yo te abracé con mi alma
y me enredé en tu pelo,
oscura pasión gitana
encendió nuestros cuerpos.
Por ti lo di tido Marina
aquella noche de invierno,
aquel Febrero helado
que nos quemaba por dentro.
Estuvimos hasta de día
amándonos y gimiendo,
yo a ti te daba la vida
tú entrelazada en mi cuerpo.
Mi corazón se desgarra
porque abrazarte hoy no puedo!,
y aunque rompiste mi alma
lo juro, no me arrepiento!!.




Miguel Ángel Peinador (nick: Nangel)

Las lunas de tus ojos
han venido a verme
en una yegua blanca
han venido a verme
.
y me encontraron dormido
ya no volveré a verte
.
y me encontraron soñando
que habían venido a verme
las lunas de tus ojos
que habían venido a verme






MERO.-Javier(nick: MERO)

un altre llum voltant el mon
deixem que pensi
que es la teva estrella
que mai no s'apagara
i que em mira
Se que ets lluny
i se que no pot ser
pero mirant al cel
t'he vist
tu tb pensa
que el cel comença
una estrella que dura
per sempre el meu mirar





FRANCISCO BLANCA (nick: Auryn)
 .- PACO (nick qaws)
 .- GORKA (nick Fox)
 JAIME (nick: EVANS)
 JUANKY (nick: juanky)
 NOEMY (nick: Noemy)
  IGNACIO nick cucuZ
DAVID DBUIDE nick David-1
 JUANJO CABO (nick: Thor)
 I.CABO(nick: Iria)
  MIGUEL  nick TIBUR   
GAMBITO
 FRANCISCO COBOS(nick: FC)
 Cristóbal(nick:Drake3)
 David(nick: Deivid)
Juanjo(nick:JJF)
 Enrique Cabello(nick:Carpov)
 JAUME (nick: Frenadol)
JOSE MANUEL(nick:Gitano)
 RICARDO(nick: Ricardo)
ALBERTO (nick:SINCLAIR)
 RAMÓN(nick: Blakbird)
DANIEL (nick: Destino)
 PEPE PICÓN(nick: Pep0)
CESAR(nick:Jackaroe)
 SINNER(nick: SINNER)
DANIEL R. SILVA(nick:Coaster)
 MARC(nick:SKA-P)
MOUZTRUO( jeje)
IGOR