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PILAR QUIROSA

Hay días que te apetece releer a autores a los que le dedicaste mucho tiempo porque amabas su palabra escrita. Recordar buenos momentos y agradecer una vez más lo mucho que hicieron con su trabajo para llegar a muchas personas que se abrían camino en el mundo de la poesía o, simplemente, que habían vuelto a editar un libro. Siempre tenía tiempo para ir a presentaciones, nunca defraudaba a nadie. Me estoy acordando de las veces que colaboró con la Revista Transparencias y sus exposiciones en Caja Granada. En concreto he copiado el poema "NAVEGACIONES"  que se publicó en la revista nº 18.  


     Fotografía cedida por María Ángeles Lonardi realizada el  19 de marzo de 2011 durante las Jornadas literarias del IEA (Instituto de Estudios Almerienses) "Volver a Uleila"


MARÍA ÁNGELES LONARDI
Pilar Quirosa, Miguel Naveros,
Julio Alfredo Egea y María Ángeles Lonardi

NAVEGACIONES


I.-  HACIA EL MAR


Llegas, amarrado al instinto.

Aquel lugar aparente, 

asidero invisible de vida y de contornos, 

viviendo al límite, 

añorando posesiones,

al servicio de la aridez. 

Leo la tablilla, que por azar anida

entre mis manos; y rompo 

una lanza, y de oeste a este, navego

a través del espejismo.

Un mundo antiguo, de estructura decadente,

acorazado el corazón, refugiado en la mesura

tiempo de reinos, de naufragios y de retamas, 

de dioses y de corazas, arena y ceniza del tiempo.

Llueve intensamente, y soy testigo de 

una estirpe por llegar, 

una leyenda negra de mortandad y de oprobios,

cerca de los pueblos del mar.


Revista Transparencias nº 18
Revista Transparencias n. 18


II.- EL GUERRERO


Es tiempo derrotado, 

destino sofocado por las horas, 

aquellas que no regresan,

triste epitafio marino.

Tipografía árida,

transitables fortalezas

que se derrumba, 

al menor soplo de viento.

Factura inviable, imagen 

escrita en la tragedia.

Bárbaros carros, enlaces, 

boras enfundadas de espinas

y un adiós ultimo, y fiel,

enredándose entre tus cabellos, 

quizás mi única patria, 

Un camino angosto, 

inmerso en la imposible espesura,

en el vaivén de los días.

Una esperanza, tardía, 

en la escarpada cornisa, 

mercenarios entre las sombras.

En esa estrecha miríada de voces,

años de ruinas de vacíos, 

de soledades y derrumbe.



III.- LA DERROTA


Luces y sombras, rumor de olas,

mientras los pueblos

sucumben ante su sueños,

y buscamos la protección 

entre las hojas no nacidas

del imposible calendario.

Enemigo mío, cruel tiempo,

pesadilla inmensa,

generada por los lustros.

Jabalina letal,

atravesando músculos y arena.

Confiado, tú, nombre mediterráneo, 

unido a tu casco y a tu destino,

ante la pesadilla

de una noche nacida, con aristas,

hacia el final de los tiempos, 

desde la eternidad de la flameada,

como punta de metal atravesando

horizontes, hielo, mares, sudor y batallas,

por siempre vulnerable. 

Enemigo mío, unido, por siglos, 

al arquero y al auriga.



IV.- EL REGRESO


Del desfiladero, la piel, 

horadada por el llanto. 

La página final que todo lo anega, 

la fe, la paz, el principio.

Tiempo, tras la oleada de invasiones, 

de gritos en silencio.

De voces apagadas

por el peso de la Historia.

Horas atravesadas por las lanzas

de lo inefable: tú, portador de la muerte, 

de todas las muertes posibles e inevitables, 

travesía falaz e inamovible,

vivida en constante afrenta. 

Amante y seductor de las estrellas

que todavía brillan en el horizonte, 

cálido regreso a Medina Habu, 

posible paraíso iluminado.

Más allá de la última playa,

más allá del Egeo, 

la única salida posible: navegación final,

definitivo descanso del guerrero

en el hallazgo atemporal de tu cuerpo



Navegaciones. Pilar Quirosa

Hay días que te apetece releer a autores a los que le dedicaste mucho tiempo porque amabas su palabra escrita. Recordar buenos momentos y agradecer una vez más lo mucho que hicieron con su trabajo para llegar a muchas personas que se abrían camino en el mundo de la poesía o, simplemente, que habían vuelto a editar un libro. Siempre tenía tiempo para ir a presentaciones, nunca defraudaba a nadie. Me estoy acordando de las veces que colaboró con la Revista Transparencias y sus exposiciones en Caja Granada. En concreto he copiado el poema "NAVEGACIONES"  que se publicó en la revista N.º 18.  






NAVEGACIONES


I.-  HACIA EL MAR


Llegas, amarrado al instinto.

Aquel lugar aparente, 

asidero invisible de vida y de contornos, 

viviendo al límite, 

añorando posesiones,

al servicio de la aridez. 

Leo la tablilla, que por azar anida

entre mis manos; y rompo 

una lanza, y de oeste a este, navego

a través del espejismo.

Un mundo antiguo, de estructura decadente,

acorazado el corazón, refugiado en la mesura

tiempo de reinos, de naufragios y de retamas, 

de dioses y de corazas, arena y ceniza del tiempo.

Llueve intensamente, y soy testigo de 

una estirpe por llegar, 

una leyenda negra de mortandad y de oprobios,

cerca de los pueblos del mar.




II.- EL GUERRERO


Es tiempo derrotado, 

destino sofocado por las horas, 

aquellas que no regresan,

triste epitafio marino.

Tipografía árida,

transitables fortalezas

que se derrumba, 

al menor soplo de viento.

Factura inviable, imagen 

escrita en la tragedia.

Bárbaros carros, enlaces, 

boras enfundadas de espinas

y un adiós ultimo, y fiel,

enredándose entre tus cabellos, 

quizás mi única patria, 

Un camino angosto, 

inmerso en la imposible espesura,

en el vaivén de los días.

Una esperanza, tardía, 

en la escarpada cornisa, 

mercenarios entre las sombras.

En esa estrecha miríada de voces,

años de ruinas de vacíos, 

de soledades y derrumbe.



III.- LA DERROTA


Luces y sombras, rumor de olas,

mientras los pueblos

sucumben ante su sueños,

y buscamos la protección 

entre las hojas no nacidas

del imposible calendario.

Enemigo mío, cruel tiempo,

pesadilla inmensa,

generada por los lustros.

Jabalina letal,

atravesando músculos y arena.

Confiado, tú, nombre mediterráneo, 

unido a tu casco y a tu destino,

ante la pesadilla

de una noche nacida, con aristas,

hacia el final de los tiempos, 

desde la eternidad de la flameada,

como punta de metal atravesando

horizontes, hielo, mares, sudor y batallas,

por siempre vulnerable. 

Enemigo mío, unido, por siglos, 

al arquero y al auriga.



IV.- EL REGRESO


Del desfiladero, la piel, 

horadada por el llanto. 

La página final que todo lo anega, 

la fe, la paz, el principio.

Tiempo, tras la oleada de invasiones, 

de gritos en silencio.

De voces apagadas

por el peso de la Historia.

Horas atravesadas por las lanzas

de lo inefable: tú, portador de la muerte, 

de todas las muertes posibles e inevitables, 

travesía falaz e inamovible,

vivida en constante afrenta. 

Amante y seductor de las estrellas

que todavía brillan en el horizonte, 

cálido regreso a Medina Habu, 

posible paraíso iluminado.

Más allá de la última playa,

más allá del Egeo, 

la única salida posible: navegación final,

definitivo descanso del guerrero

en el hallazgo atemporal de tu cuerpo



EN EL VÉRTIGO AZUL DE UNA MIRADA

  

En el vértigo azul de una mirada



Contraportada

Diez miradas le hicieron falta a Huidobro para descubrir la belleza entre un sueño y una catástrofe; Sabines buscó el rastro de una mirada en la sombra del agua y el eco de un suspiro; Cernuda, una mirada fugaz entre las sombras; Storni la perdió distraídamente sin volverla a encontrar; y Bécquer… Bécquer la intercambió por un mundo. ¿Cuánto vale una mirada en la poesía? María Ángeles Lonardi lo sabe bien. Por eso, los versos que componen En el vértigo azul de una mirada retoman esta imagen en un tiempo como el nuestro que demanda una mirada activa.

En estos versos Lonardi nos regala su mirada, generosa y honesta. Al igual que la de los poetas románticos, se dirige hacia adentro, se sumerge en las aguas más profundas, como diría Shelley en su «Endymion», pero también mira punzantemente al exterior, a la realidad social, y la denuncia sin tapujos.

En este viaje a través de la mirada, Lonardi mira sin miedo y nos hace mirar con ella. Sin miedo. Mirar es un acto de elección, ya lo decía Berger. Si elegimos mirar con Lonardi nos veremos a nosotros y a nosotras mismas en los espejos de sus palabras pero también, como Alicia, los cruzaremos para ver qué hay al otro lado.

Tal vez encontremos el abrazo que tanto anhelamos.

                                               Gerardo Rodríguez Salas

 

 

 

Mira desde su razón existencial, la observancia ancestral y, el tiempo de pandemia en que nos ahogamos infinitamente, sin ver el final de esos túneles de miedos individuales. Todo de vuelta, hasta encontrarse reblandeciendo el alma en los recuerdos.  Busca el mapa de los recuerdos, sin hallar la llave que abre ese espacio secreto, y como quien se sumerge en lo profundo de un mar, busca las horas para entender este lapso, latido convulso del mundo, en la espera de que amaine la tormenta.

Ansía despertar ante un tiempo de paz, sin miedo al abrazo, al encuentro, a todo aquello que se nos prohibió por imposición de un invasor invisible y tras la ventana, ella, en su mirada enjaulada como la de todos en estos azarosos tiempos de muerte, sentencia a sí misma una renovación para el futuro, una energía mágica que desde ella a todos abarque.

                                                                         Ivonne Sánchez Barea



Poeta

 


El vértigo azul de tu mirada   


Detenida, la vida permanece

en el vértigo azul de tu mirada.

Se me escapan las fuerzas,

las palabras me faltan.

Creo que no he conocido

más dolorosa y salvaje intemperie,

como aquella que suele visitarme

cuando cierras los ojos

en frugal parpadeo.

Los versos nuevos son como los pájaros

que vuelan libres, luego,

cruzan todos los puentes

derrotando misterios

y dibujan el mapa del derroche.

Lo sé, miedo me da

esta avaricia con que ahora mido

procaz cada rizada hora sin ti.

Puede mi cuerpo torpe, ensimismado,

marchito, ya de vuelta

de locas travesías,

subyugarse con tu esencia y caer

en este y a cada instante. Confieso,

me faltan las palabras

para decir qué siento piel adentro.

El silencio de la noche es testigo

de este fiero tormento.

Dentro, cada latido es demasía,

es algarabía este parpadeo,

es ternura la luz y es este beso

nuevo perfil del sueño

del que no quiero despertar jamás.

Un remolino desconsiderado

me absorbe, me desviste

y se hace el epicentro,

el ojo oscuro, insolente huracán

por donde raudas huyen,

acotadas mis pobres esperanzas.

Aun mermadas mis posibilidades

me atrevo, trato de encontrar la clave

que descubra el misterio

del que tus ojos supieron hablarme.

Luego, me domina la incertidumbre,

cuando torpemente voy a buscarte.

Entonces  me descubro vulnerable.

A pesar de saber de tu existencia,

es apenas un parpadeo tuyo

el que me hace caer

por el precipicio definitivo

y me sobra el universo todo.

 

 

©María Ángeles Lonardi

Del libro: “En el vértigo azul de una mirada”,

Editorial:  Círculo Rojo, 2021.



 

 María Ángeles Lonardi

Profesora, Poeta y Escritora



EN EL VÉRTIGO AZUL DE UNA MIRADA

 

En el vértigo azul de una mirada


Contraportada

Diez miradas le hicieron falta a Huidobro para descubrir la belleza entre un sueño y una catástrofe; Sabines buscó el rastro de una mirada en la sombra del agua y el eco de un suspiro; Cernuda, una mirada fugaz entre las sombras; Storni la perdió distraídamente sin volverla a encontrar; y Bécquer… Bécquer la intercambió por un mundo. ¿Cuánto vale una mirada en la poesía? María Ángeles Lonardi lo sabe bien. Por eso, los versos que componen En el vértigo azul de una mirada retoman esta imagen en un tiempo como el nuestro que demanda una mirada activa.

En estos versos Lonardi nos regala su mirada, generosa y honesta. Al igual que la de los poetas románticos, se dirige hacia adentro, se sumerge en las aguas más profundas, como diría Shelley en su «Endymion», pero también mira punzantemente al exterior, a la realidad social, y la denuncia sin tapujos.

En este viaje a través de la mirada, Lonardi mira sin miedo y nos hace mirar con ella. Sin miedo. Mirar es un acto de elección, ya lo decía Berger. Si elegimos mirar con Lonardi nos veremos a nosotros y a nosotras mismas en los espejos de sus palabras pero también, como Alicia, los cruzaremos para ver qué hay al otro lado.

Tal vez encontremos el abrazo que tanto anhelamos.

                                               Gerardo Rodríguez Salas

 

 

 

Mira desde su razón existencial, la observancia ancestral y, el tiempo de pandemia en que nos ahogamos infinitamente, sin ver el final de esos túneles de miedos individuales. Todo de vuelta, hasta encontrarse reblandeciendo el alma en los recuerdos.  Busca el mapa de los recuerdos, sin hallar la llave que abre ese espacio secreto, y como quien se sumerge en lo profundo de un mar, busca las horas para entender este lapso, latido convulso del mundo, en la espera de que amaine la tormenta.

Ansía despertar ante un tiempo de paz, sin miedo al abrazo, al encuentro, a todo aquello que se nos prohibió por imposición de un invasor invisible y tras la ventana, ella, en su mirada enjaulada como la de todos en estos azarosos tiempos de muerte, sentencia a sí misma una renovación para el futuro, una energía mágica que desde ella a todos abarque.

                                                                         Ivonne Sánchez Barea



Poeta

 


El vértigo azul de tu mirada   


Detenida, la vida permanece

en el vértigo azul de tu mirada.

Se me escapan las fuerzas,

las palabras me faltan.

Creo que no he conocido

más dolorosa y salvaje intemperie,

como aquella que suele visitarme

cuando cierras los ojos

en frugal parpadeo.

Los versos nuevos son como los pájaros

que vuelan libres, luego,

cruzan todos los puentes

derrotando misterios

y dibujan el mapa del derroche.

Lo sé, miedo me da

esta avaricia con que ahora mido

procaz cada rizada hora sin ti.

Puede mi cuerpo torpe, ensimismado,

marchito, ya de vuelta

de locas travesías,

subyugarse con tu esencia y caer

en este y a cada instante. Confieso,

me faltan las palabras

para decir qué siento piel adentro.

El silencio de la noche es testigo

de este fiero tormento.

Dentro, cada latido es demasía,

es algarabía este parpadeo,

es ternura la luz y es este beso

nuevo perfil del sueño

del que no quiero despertar jamás.

Un remolino desconsiderado

me absorbe, me desviste

y se hace el epicentro,

el ojo oscuro, insolente huracán

por donde raudas huyen,

acotadas mis pobres esperanzas.

Aun mermadas mis posibilidades

me atrevo, trato de encontrar la clave

que descubra el misterio

del que tus ojos supieron hablarme.

Luego, me domina la incertidumbre,

cuando torpemente voy a buscarte.

Entonces  me descubro vulnerable.

A pesar de saber de tu existencia,

es apenas un parpadeo tuyo

el que me hace caer

por el precipicio definitivo

y me sobra el universo todo.

 

 

©María Ángeles Lonardi

Del libro: “En el vértigo azul de una mirada”,

Editorial:  Círculo Rojo, 2021.


https://youtu.be/qUPgjsLkgx8

 

 María Ángeles Lonardi

Profesora, Poeta y Escritora


                    YouTube de María Ángeles Lonardi   


https://youtu.be/qUPgjsLkgx8
 


Una notte mágica

UNA NOTTE MÁGICA

La Antología se edita y publica en Roma y la consigna era escribir un poema o narración, que hablara sobre el misterioso encuentro en el Bois de Boulonge, un bosque donde Marcel Proust, famoso novelista francés, por medio de una carta misteriosa, cita a un grupo de personas y amigos cercanos. Nadie sabe a ciencia cierta para qué fue esa reunión ni cuál era el verdadero sentido de haberlos reunido, quizás una despedida, o una última conversación…la imaginación de los 67 autores que participamos hizo el resto. Hay quien se lo planteó desde antes que ocurriera el encuentro, antes de medianoche, otros durante, otros luego en la trasnoche y otros a la madrugada del día siguiente. El resultado es “Una notte mágica” excepcional y fantástica edición a todo color, con ilustraciones espléndidas y muy bien hecha realizada por Roberto Maggiano, Giuliano Brena, cubierta y diseño de Allessandra Magoga y Benedetta Hascinbem. Copiright La Recherche.it, 2019.

UNA NOTTE MÁGICA

Mi poema aparece a medianoche, sobre las 12.00 o 24.00 como se prefiera y se publica en español y en italiano. La traducción fue de Roberto Maggiani. La distribución de los poemas y textos es en función del horario al que hacen alusión. También aparecen poemas de Marcel Proust traducidos como “Pederastia” o “Deux Poemes”  entre otros.


UNA NOTTE MÁGICA


POEMA DE MARÍA ÁNGELES LONARDI









Una notte mágica

MARÍA ÁNGELES LONARDI

En esta página de Larecherche.it se puede conseguir para descargar en PDF o epub o kindle. 

https://www.larecherche.it/librolibero_ebook.asp?Id=241  

En amazon https://www.amazon.it/dp/1078144605

Una notte mágica


La Antología se edita y publica en Roma y la consigna era escribir un poema o narración, que hablara sobre el misterioso encuentro en el Bois de Boulonge, un bosque donde Marcel Proust, famoso novelista francés, por medio de una carta misteriosa, cita a un grupo de personas y amigos cercanos. Nadie sabe a ciencia cierta para qué fue esa reunión ni cuál era el verdadero sentido de haberlos reunido, quizás una despedida, o una última conversación…la imaginación de los 67 autores que participamos hizo el resto. Hay quien se lo planteó desde antes que ocurriera el encuentro, antes de medianoche, otros durante, otros luego en la trasnoche y otros a la madrugada del día siguiente. El resultado es “Una notte mágica” excepcional y fantástica edición a todo color, con ilustraciones espléndidas y muy bien hecha realizada por Roberto Maggiano, Giuliano Brena, cubierta y diseño de Allessandra Magoga y Benedetta Hascinbem. Copiright La Recherche.it, 2019.



Mi poema aparece a medianoche, sobre las 12.00 o 24.00 como se prefiera y se publica en español y en italiano. La traducción fue de Roberto Maggiani. La distribución de los poemas y textos es en función del horario al que hacen alusión. También aparecen poemas de Marcel Proust traducidos como “Pederastia” o “Deux Poemes”  entre otros.





POEMA DE MARÍA ÁNGELES LONARDI




Una notte mágica

MARÍA ÁNGELES LONARDI

En esta página de Larecherche.it se puede conseguir para descargar en PDF o epub o kindle. 

https://www.larecherche.it/librolibero_ebook.asp?Id=241  

En amazon https://www.amazon.it/dp/1078144605