Las horas sentidas 1. Ángel Simón Collado

Sufrir el tiempo siempre. Lo perdido. Un presente continuo hacia la nada. El futuro: un ayer en el mañana. Y siempre batallar, siempre en lo efímero Morir es su destino y lo presente midiendo a cada instante su distancia. Un deseo de vivir en la ignorancia, y un irse consumiendo mansamente. Temblor callado es que se eterniza sin un posible anhelo de esperanza, y todo gozo es gozo que se alcanza, en un sabor a polvo y a ceniza. Morir es mi destino y mi tormento. Y siempre ocultamente, ( y siempre en vano escondido en la vida), hay un acento a quien me ofrecería aquí en mi mano una luz que aliviara el pensamiento de la tierra, del fuego, del gusano.