Apuntes: Antropología y literatura. Rayuela. Maribel Cerezuela


Desde un punto de vista antropológico hemos estudiado al hombre contemporáneo con unas características que le son inherentes de una forma especial.
En Rayuela, de Julio Cortázar, éstas notas típicas son analizadas y expresadas a través de distintos personajes de la novela.
En el presente trabajo, a modo de muestra, quedan seleccionados unos textos de Rayuela, en los que se ponen de manifiesto el pensamiento del autor, en relación con la forma de ser del hombre de hoy, y más concretamente analizando su:
-Desfondamiento
-Frontería
-Indefinitud
El concepto de “La praxis” aunque queda de alguna manera reflejada en la novela de una forma teórica, no es precisamente el núcleo central de la misma.

El autor plantea un problema anterior a la acción: “¿Qué entendemos por bueno o verdadero?” Para él son nociones puramente históricas, se fundan en una ética heredada, "pero la historia y la ética me parecen a mí altamente dudosas". Dice el autor en boca de Olveira que es el personaje central de "Rayuela" cfr. cap. 16. pág. 544
La profunda ambigüedad de que gozan los personajes aparece en toda la novela en un intento desconcertante, por crear algo completamente distinto a lo ya conocido. Cortázar piensa que la ambigüedad de la vida, da pié incluso para formular otro tipo de concepción literaria.
“La novela que nos interesa, no es la que va colocando los personajes, en la situación, sino la que instala la situación en los personajes. Con los cuales éstos dejan de ser personajes para volverse personas. Hay como una extrapolación mediante la cual ellos saltan hacia nosotros, o nosotros hacia ellos...” cfr. cap. 115 pág. 543
En esta misma línea de ambigüedad, se percibe en la novela un aspecto de rebeldía con todo lo relacionado a la cultura establecida, definiéndose el personaje central, Oliveira, como el hombre que busca:
“Ya para entonces me había dado cuenta de que buscar era mi signo, emblema de los que salen de noche sin propósito fijo, razón de los matadores de brujas” cfr. cap. 1, pág. 20