V.- De la Experiencia humana al compromiso

           "La Revolución cubana me despertó a la realidad de América Latina; fue cuando de una indignación meramente intelectual pasé a decirme: Hay que hacer algo. El proceso se había iniciado aquí en París conmigo, en la época de "Rayuela", y antes con "El perseguidor". "El descubrimiento del prójimo, de la humanidad ofendida, humillada, alienada, ese abrirme a una serie de cosas que hasta entonces no habían pasado de ser simples telegramas: La guerra de Cuba, el Tercer Mundo, y que no habían pasado de una consideración meramente teórica y de pronto ver un pueblo que recupera su dignidad, su personalidad, con una misión histórica que cumplir, eso fue para mí una experiencia que me sacudió lo más profundo".

            Se compromete más tarde con la resistencia chilena, se incorpora al Tribunal Russell. No hace política cuando hace literatura, aun cuando el contenido sea político, lo que hace es poner la literatura como vehículo útil políticamente, como "El libro de Manuel", dentro de una perspectiva de transformación de antropologia literaria a la que aspira.